La llegada de polvo sahariano (presencia de arcillas y otros minerales) ocurre en episodios puntuales, esporádicos y muy irregulares. Debemos aprovechar dicha lluvia para las plantas por sus efectos desinfectantes, nutritivos y fungicidas.
Antiguamente cuando no existían pesticidas, los agricultores y jardineros utilizaban el barro como tratamiento preventivo de enfermedades.
De la misma manera que el barro beneficia a las plantas, lo hace con las personas.
Muchas culturas han utilizado el barro desde la antigüedad.