Aproximadamente en el mes de mayo según añada o condiciones meteorológicas el crecimiento del cyclamen empieza a a pararse: las hojas se secan y van desapareciendo. Tenemos dos pautas a seguir y a escoger para recuperar un ciclamen de una año para otro:
Primera pauta:
Con las primeras señales de que el crecimiento se para, las hojas se secan y van desapareciendo aproximadamente ocurre en el mes de mayo según añada o condiciones meteorológicas.
Debemos practicar lo siguiente:
– Parar el riego.
– Esperar que la planta se marchite.
– Eliminar todas las hojas secas y otros restos vegetales cerca del bulbo para que el sol y el aire endurezca y limpie el bulbo.
– Cuando el bulbo ya esté totalmente seco arrancarlo y cortar todas las raíces arras del bulbo, limpiando los restos de tierra.
– Ponerlo a secar al sol, desinfectarlo con un buen fungicida e insecticida y guardarlo en una habitación seca y bien aireada.
– Pasados los rigores del verano, se recomienda plantarlo. Debemos saber que el ciclamen a diferencia de otros bulbos descansa en verano.
– Plantarlo en sustratos arenosos de buena calidad
– No enterrarlos profundamente a diferencia de la gran mayoría de plantas bulbosas. La parte superior del bulbo debe quedar al aire libre.
Segunda pauta:
Los cyclamens pueden conservarse todo el verano en su sitio de origen sin arrancarlos siempre y cuando cumplan estas condiciones:
– Si están en un lugar o zona muy favorable.
– Si se reduce el riego considerablemente o totalmente.
– Si se limpian los restos orgánicos que están alrededor del bulbo
– Si se practica algún tratamiento fungicida desinfectante.
– Se aconseja airear la tierra, añadir un poco de sustrato si hace falta y abonos.