La maravilla de algunas begonias es que coincide una hoja preciosa en color y textura más unas vistosas flores. Vamos a conocer mejor las begonias y los cuidados que precisan:
Originarias de las regiones tropicales y subtropicales húmedas de todos los continentes salvo Oceanía. Existen más de 1.500 especies conocidas, que van desde vivaces rizomatosas (un rizoma es un tallo subterráneo con varias yemas que crece de forma horizontal emitiendo raíces y brotes herbáceos de sus nudos) de unos centrímetros de altura hasta arbustos de 3 metros. La mayoría son perennes. La maravilla de algunas begonias es que coincide una hoja preciosa en color y textura más unas vistosas flores. Las arbustivas se reproducen fácilmente por esqueje, la mejor época para practicarlo es en verano.
Las begonias se dividen en:
Grupo rex: Con rizoma y con follaje ancho multicolor, a veces verrugoso. El haz y el envés son de distinto color. Flores discretas.
Grupo semperflorens: Se trata de begonias enanas y arbustivas con grandes cantidades de flores.
Grupo tuberhybrida: Se trata de begonias tuberosas. Una raíz tuberosa es un tipo de órgano subterráneo de acumulación de nutrientes tal como los rizomas, cormos, bulbos y tubérculos. La raíz tuberosa, como su nombre lo indica, es una raíz engrosada adaptada para la función de almacenamiento de reservas. Disponen de grandes y preciosas flores con gran variedad de colores
Las begonias con tallos de caña o tipo bambú, las de floración invernal, las arbustivas y rizomatosas se pueden exponer al exterior en climas sin heladas.
Las más comerciales son:
Begonia semperflorens: Son anuales o de 9 meses pero en espacios protegidos y bien cuidadas pueden convertirse en bianuales. Su apariencia es delicada pero con tierras preparadas el resultado es muy interesante. Es la planta anual que está más meses en floración. Es ideal para climas mediterráneos y puede exponerse al sol. Las que no son enanas sino arbustivas pueden llegar hacer 50/60 cm de alto.
Begonia elatior, tamaya, nelumbifolia, picta y fucsioides.
Como cuidarlas:
Funcionan bien en climas mediterráneos protegidos del viento y del frío.
-Necesitan un drenaje perfecto
-Tierras: disponemos de dos opciones:
1- Sólo con tierra ácida
2- Una tierra universal de gran calidad que no se compacte nunca, rica en turba.
-No regar si la tierra está húmeda
-Remover a menudo la tierra para sanearla y ventilarla
-Abonados ligeros con dosis muy bajas y abonar amenudo con microelementos
-No duchar las hojas
-Exposición: Sol y sombra