– escoger una planta adecuada según nuestras condiciones climáticas y medioambientales.
– escoger una buena tierra y la apropiada para el tipo de planta.
– abonarla periódicamente.
– regarla adecuadamente
– proporcionarle la humedad y luz necesaria
– garantizarle un drenaje y percolación perfecta
– y saber que cuidados necesita en particular la planta escogida